El Grupo Piloto acoge con agrado el deseo expresado ayer por la canciller alemana, Ángela Merkel, y por su homólogo austríaco, Werner Faymann, en el sentido de instaurar un impuesto a las transacciones financieras dentro de la zona euro y de debatir este proyecto en la próxima reunión de ministros de finanzas de los 17 países miembros.
Son dos nuevos apoyos importantes a las propuestas hechas por el Grupo Piloto con miras a financiar la ayuda al desarrollo por medio de un impuesto ínfimo a las transacciones financieras.
Alemania y Austria se suman así a los países de la zona euro que ya se han pronunciado a favor de este financiamiento innovador (especialmente España y Bélgica), en particular en el seno de la Task Force correspondiente del Grupo Piloto. Muchos otros países participantes no europeos, como el Japón, Noruega o Benín, también firmaron la Declaración presentada por el Grupo Piloto el 21 de septiembre pasado, con el apoyo de Jean Ping (Unión Africana) y del Comisario europeo Piebalgs.
Esta contribución solidaria sería de un monto pequeñísimo, para no causar ningún efecto negativo, pero permitiría recaudar sumas considerables para financiar los Objetivos de Desarrollo del Milenio y la adaptación al cambio climático de los países del Sur, como complemento de la Ayuda Oficial para el Desarrollo.
La Presidencia francesa del G20 recordó en numerosas ocasiones el carácter urgente que revestía la puesta en práctica de esta financiación innovadora con algunos países pioneros. El debate internacional avanza sobre el tema que ya está siendo considerado en numerosas instancias (FMI, Grupo Meles-Stoltenberg, Grupo Piloto) como técnicamente factible y económicamente racional.
El 4 de marzo de 2011